Iremos colgando nuestras experiencias fotográficas relacionadas con la naturaleza.

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Saludos cordiales.

jueves, 30 de octubre de 2014

Herpetofauna

Hola a todos. Esta vez hablaremos de un grupo de animales muy especial para nosotros, los reptiles. Hemos escogido unas pocas especies al azar dentro de esta gran clase como entrada general e introductoria a ella, pero más adelante haremos entradas más específicas de los diferentes ordenes o especies concretas.

Algunas de las caracteristicas destacables de la clase Reptilia son que poseen una piel provista de escamas córneas epidérmicas, a veces con el añadido de placas óseas dérmicas; extremidades pares, adaptadas para trepar, correr, o nadar, siendo ausentes en serpientes e incluso algún lagarto; un sistema excretor que conserva el agua y tiene como residuo nitrogenado ácido úrico (al igual que en los pájaros), fertilización interna y huevos con cascara calcárea o coriácea (por supuesto hay individuos ovovivíparos, por lo que podemos observar algunos reptiles pariendo); y por último pero no menos importante son ectotérmicos, es decir, regulan su temperatura corporal moviéndose entre lugares con diferentes temperaturas. Debido a esta última característica es tan común observar a los reptiles tomando baños de sol.

Taxonomía dentro de esta Clase:

Clase Reptilia
   Subclase Anapsida
          Orden Testudines (Quelonios)
   Subclase Diapsida
      Superorden Lepidosauria
         Orden Squamata (Lagartos, Culebrillas ciegas, y Serpientes)
           Suborden Lacertida
           Suborden Amphisbaenia
           Suborden Serpentes

Las primeras imágenes elegidas son del reptil más común en nuestro país, la lagartija roquera (Podarcis mularis), que vemos continuamente soleándose en los muros.

                                           


Lagartija cenicienta (Psammodromus hispanicus). A pesar de su pequeño tamaño nos parece una de las lagartijas más bonitas de nuestro país, con sus vistosas rayas amarillas. Fue difícil tomar las fotos, ya que suelen estar en zonas de arbustos y tuvimos que apañarnos para hacer unas tomas en un claro.




El mismo día que tuvimos suerte con la cenicienta pudimos disfrutar también un rato de este macho de lagartija colilarga (Psammodromus algirus). Se ven claramente dos ocelos azules a la altura de la cintura pectoral, que nos indican que es un macho. En esta especie nos resultaron muy llamativas las escamas, claramente carenadas y puntiagudas.




Otra lagartija presente a lo largo y ancho de nuestra orografía, es la lagartija ibérica (Podarcis hispanicus).



 

Ahora un eslizón tridáctilo (Chalcides striatus). Este lagarto, con sus pequeños miembros vestigiales puede resultar muy raro si no lo habías visto antes. A pesar de su aspecto vermiforme, que le hace parecer una culebrilla con patas, es un lagarto en toda regla, con párpados y demás características de dicho grupo. Tiene restos de muda por lo que no está en todo su  explendor, pero no es un animal que hayamos visto muchas veces.




A continuación os mostramos otro ejemplar de eslizón tridáctilo sin restos de muda.



 

Seguimos con esta entrada mostrándoos ahora un lagarto ocelado (Timon lepidus), un reptil increíble, tanto por su coloración de la época de apareamiento, como por su fuerza y agresividad; pues no es fácil de manejar para realizar las fotos ya que trata de escapar, como es lógico, y tampoco dudará en morderte. Cuando estás fotografiando a estos grandes lagartos, te invade por dentro una sensación que solo puede conocer alguien que haya vivido esa experiencia, y estos momentos quedan grabados para nosotros en forma de las fotografías que aquí os mostramos. 





Aquí una foto de otro lagarto ibérico, aunque de menor tamaño. Es un lagarto verde occidental (Lacerta bilineata) todavía en etapa juvenil.



Para cerrar esta segunda entrada del blog hemos dejado la primera serpiente que vimos con nuestros equipos de fotografía. Fue algo indescriptible y nos gustaría relatar nuestra experiencia en unas pocas líneas, no solo porque nos fascinan, sino porque es una pena ver como la gente si puede, acaba con ellos. Lo que realmente sucede es que el miedo adquirido que tenemos hacia ellas nos lleva a matarlas, cuando lo que deberíamos hacer es trasmitir nuestros conocimientos acerca de sus beneficios para intentar salvarlas. Siempre nos ha parecido curioso como un oso es un ser adorable al que hay que abrazar mientras que una serpiente no venenosa e inofensiva es un animal que debe morir.

Dejando a un margen dicho tema pasamos a relataros la experiencia: Una mañana calurosa de septiembre nos dispusimos a ir en busca de serpientes. Era un día con buenas condiciones ambientales, pero pasaba la mañana y no conseguíamos ver ningún ejemplar de dicho grupo. Sin embargo, un subidón de adrenalina nos recorrió la sangre cuando al voltear una piedra cualquiera, apareció esta culebra lisa meridional (Coronella girondica). Cabe decir, que pese a conocer las diferentes especies de serpientes, al verlas entre la maleza te bloquea ese miedo a la posibilidad de que se trate de una víbora y es como sí todos los conocimientos se esfumasen, hasta que al fin empiezas a ver todos los caracteres propios de colúbridos y puedes cogerla.